Introducción
El presente ensayo, intenta adoptar la mirada desde el nuevo enfoque económico, mediante el cual el desarrollo debe ser entendido como un proceso complejo, dinámico y multidimensional que trae cambios en lo social, las actitudes de la población, sin dejar de lado la aceleración del crecimiento económico, la reducción de la desigualdad y la disminución de los márgenes de pobreza.
Recordando que el bienestar de las personas, la calidad de vida, o como hoy se declara en la Constitución Política del Estado, como el Vivir Bien depende positivamente del ingreso per-cápita y en forma negativa en relación a la pobreza y la desigualdad, se decidió abordar ésta última temática.
Las experiencias pasadas demuestran que la extrema desigualdad de ingresos aumenta la ineficiencia económica, afecta a la estabilidad social y se percibe como injusta.
Por tanto, el objetivo central del ensayo es profundizar el estudio de la dinámica existente en la distribución de los ingresos para la economía boliviana en forma global, y los departamentos de Cochabamba, La Paz y Santa Cruz en particular, en los años 2005, 2017 y 2020.
1. Metodología
El período de estudio tiene como referencia tres momentos, que conllevan resultados del modelo económico anterior y el modelo actual. La principal fuente de información utilizada en el trabajo son las Encuestas Integradas de Hogares de los años 2005, 2017 y 2020, efectuadas por el INE. La unidad de análisis fue el hogar. Entre los principales hallazgos destaca la construcción de curvas de Lorenz (Paquete STATA Versión 16.0) que reflejan una notable mejora en la distribución de los ingresos el año 2017 en relación al año 2005 y una leve mejora el año 2020 en relación a 2017.
2. Elementos teóricos
La distribución del ingreso ha sido una variable clave en las ciencias económicas. En el enfoque de Sen la igualdad debería buscarse en la capacidad de cada individuo para transformar los medios en libertades.
La economía intentó en los últimos años discutir los aspectos equitativos y relacionarlos con el desempeño macroeconómico. La desigualdad del ingreso comienza a aumentar impulsada por la desigualdad salarial (Atkinson, 1997).
El desigual desempeño de las economías de América latina genera un debate sobre el papel de la desigualdad y las políticas económicas (Birdsall et al., 1995) (Chenery et al., 1974; Muñoz, 1979).
Mientras que anteriormente la causalidad iba desde el crecimiento económico hacia la distribución del ingreso en un sentido positivo, en la actualidad se enfatizan los potenciales efectos negativos (Barro, 1999; Benabou, 1996; Ferreira, 1999). A continuación, probaremos esta relación para el caso boliviano.
Para analizar la desigualdad, se tomó el coeficiente de Gini, ideado por el estadístico italiano Corrado Gini, normalmente se utiliza para medir la desigualdad de los ingresos, dentro de un país. Los coeficientes de Gini son medidas agregadas de desigualdad, cuyo rango de variación va de 0 (igualdad perfecta) a 1 (desigualdad perfecta).
Para medir la desigualdad, también se utiliza la curva de Lorenz, herramienta estadística propuesta en 1905 por Max Otto Lorenz. Curva de Lorenz es otra forma común de analizar estadísticas de ingresos personales. El número de receptores de ingresos se traza en el eje horizontal, no en términos absolutos, sino en porcentajes acumulados.
El eje vertical muestra la participación del ingreso total recibido por cada porcentaje de población. Se ha contabilizado a todo el 100% de la población. El eje vertical muestra la participación del ingreso total recibido por cada porcentaje de población. También es acumulativo hasta el 100%, lo que significa que ambos ejes tienen la misma longitud. La figura completa está encerrada en un cuadrado, y una línea diagonal se dibuja desde la esquina inferior izquierda (el origen) del cuadrado hasta la esquina superior derecha. En cada punto de esa diagonal, el porcentaje de ingresos recibidos es exactamente igual al porcentaje de destinatarios de ingresos.
La línea diagonal representa la “igualdad perfecta” en la distribución del tamaño del ingreso. En suma, la curva de Lorenz muestra la relación cuantitativa real entre el porcentaje de receptores de ingresos y el porcentaje del ingreso total que efectivamente recibieron durante un tiempo determinado.
3. Elementos empíricos
Observando los datos del crecimiento económico en Bolivia, desde el año 1970, se puede apreciar que el mismo fue fluctuante y variable. Sin embargo, los últimos años se observa un comportamiento más sostenido, registrándose para el período 2005 - 2018 un promedio de 4.84%, muy cercano al 5%, catalogándolo como un país de crecimiento económico alto. A partir del año 2019, se observa una caída significativa del crecimiento económico (2.2%) y acrecentada de sobremanera por la Pandemia el año 2020 (-7.8%) (Véase Gráfico No.1).
Observando los porcentajes de pobreza moderada, en 2000, 66 de cada 100 eran pobres, mientras que el año 2018, tan sólo 35 de cada 100, se encontraban en condiciones de pobreza, observándose una fuerte disminución. En relación, a la evolución de la extrema pobreza, el año 2000, 45 de cada 100 vivían con menos de un dólar por día y veían al menos tres de seis derechos sociales incumplidos -rezago educativo, carencias de alimentación, de servicios de salud, de calidad y espacios de vivienda, de servicios básicos de la vivienda o de seguridad social- mostrándose en el período 2000 a 2018, una tendencia a la baja muy significativa, alcanzando el año 2018 a 15 de cada 100. Si comparamos, esta tendencia con otros países, el efecto fue mayor, países en los cuales las metas de reducción fueron mucho menos ambiciosas. (Véase Gráfico No.2).
Para analizar la distribución de ingresos en nuestro país, podemos observar que el año 2005 el coeficiente de Gini alcanzaba un valor de 0.6, experimentando a partir de ese momento una disminución, hasta alcanzar para el año 2019 un valor de 0.42. Cabe destacar, que el coeficiente de Gini, para los países con distribuciones de ingreso altamente desiguales típicamente se encuentran entre 0.50 y 0.70, rango en el que se encontraba nuestro país hasta el año 2009, a partir de ese año hasta nuestros días, Bolivia se encuentra transitando en forma sostenida, hacia una economía cada vez más igualitaria. El año 2020, el coeficiente de Gini se incrementó a 0.45, como efecto de la Pandemia por COVID 19 denotando un aumento de la desigualdad en la distribución de ingresos (Véase Cuadro No.1).
NIVEL DE DESIGUALDAD | |||
---|---|---|---|
AÑO | GINI | GINI URBANO | GINI RURAL |
1996 | 0,59 | 0,51 | 0,61 |
1997 | 0,59 | 0,52 | 0,63 |
1999 | 0,58 | 0,49 | 0,64 |
2000 | 0,62 | 0,53 | 0,69 |
2001 | 0,59 | 0,53 | 0,64 |
2002 | 0,6 | 0,54 | 0,63 |
2005 | 0,6 | 0,54 | 0,66 |
2006 | 0,59 | 0,53 | 0,64 |
2007 | 0,56 | 0,51 | 0,64 |
2008 | 0,52 | 0,46 | 0,56 |
2009 | 0,5 | 0,45 | 0,53 |
2011 | 0,47 | 0,41 | 0,54 |
2012 | 0,47 | 0,42 | 0,54 |
2013 | 0,48 | 0,42 | 0,53 |
2014 | 0,48 | 0,44 | 0,53 |
2015 | 0,47 | 0,42 | 0,52 |
2016 | 0,48 | 0,41 | 0,51 |
2017 | 0,46 | 0,4 | 0,54 |
2018 | 0,43 | 0,39 | 0,55 |
2019 | 0.42 | 0.39 | 0.47 |
2020 | 0.45 | 0.41 | 0.48 |
FUENTE: Elaboración Propia en base a datos del INE.
4. Resultados del procesamiento estadístico
Con miras a entender mejor la distribución de la riqueza en Bolivia, y ante la inexistencia de datos comparativos entre el año 2005, marcado por un modelo de tinte neoliberal y los años 2017 y 2020, como fruto de un modelo Económico, Social, Comunitario y Productivo. Se decidió construir Curvas de Lorenz y dividir la población en cuantiles -Véase en anexos, datos procesados en STATA-. La curva de Lorenz es una de las gráficas más poderosas en el campo estadístico, se caracteriza por su sencillez, por el poder de síntesis y su potencial analítico.
Caso boliviano: En base a las curvas de Lorenz construidas y la división de la población en cuantiles, se pudo observar que el año 2020 la distribución es más igualitaria que el año 2005 (Gráficos Nos. 3, 4 y 5 ). Destaca el hecho que el 5% de la población más rica en 2005 se apropiaba del 30% de la riqueza. En tanto que para el año 2017, el 5% más rico se apropiaba de tan sólo el 18%, para el año 2020, se tiene, de igual manera, que el 5% de la población más rica se apropia del 18% de la riqueza, aspecto que nos permite afirmar que no hubo avances entre 2017 y 2020 en materia de distribución de ingresos, en parte, por los efectos derivados de la pandemia por COVID 19. Aspecto que reflejó mejoras en la distribución de los ingresos entre 2005 y 2017, seguido de un estancamiento en el período 2017 y 2020 (Ver cuadros Nos. 2, 3 y 4).
Efectuando similar análisis por departamentos, se puede observar en forma gráfica que la distribución es más equitativa en Cochabamba, La Paz y Santa Cruz el año 2017 en relación a 2005. Posteriormente, entre 2017 y 2020 no hubo mejoras en la distribución de ingreso, derivado de la difícil situación económica que se vivió a raíz del COVID 19 (Véanse gráficos No. 6, No.7, No. 8, No. 9, No. 10, No. 11, No. 12, No. 13 y No. 14 en anexos). Así mismo, se verificó dichos hallazgos en base a la división de la población en cuantiles.
Caso Cochabamba: para el año 2005 podemos observar que el 5% de la población con mayores ingresos se apropiaba del 28% de la riqueza, dicho porcentaje se redujo, alcanzando para el año 2017 el valor de 18%, inferior en diez puntos porcentuales, denotando por tanto mayor equidad en el período señalado. Seguidamente, se efectuó el mismo cálculo para el año 2020, encontrándose que el 5% de la población con mayores ingresos se apropia tan sólo del 16% de la riqueza. Vale decir que hubo una mejora de dos puntos porcentuales el 2020 en relación a 2017, en la distribución del ingreso. (Cuadros No. 5, No. 6 y No. 7 en anexos)
Caso La Paz: el año 2005, se tenía que el 5% de la población que tenía mayores recursos, se apropiaba del 34% de la riqueza, comparando con el año 2017, el 5% de la población más rica se apropiaba de tan sólo el 18%. Con una importante reducción de 16% (cuadros No. 8, No. 9 y No. 10 en anexos). Sin embargo, cuando efectuamos el cálculo para el año 2020, se tiene que el 5% de la población con mayores ingresos se apropia del 18% de la riqueza, denotando que no hubo avances en materia de distribución de los ingresos - período 2017 a 2020- en el departamento de La Paz.
Caso Santa Cruz: Los datos procesados indican que el 5% de la población más rica -en 2005- se apropiaba del 31% de la riqueza. Mientras que para el año 2017, experimentó una importante reducción, el 5% de la población con mayores ingresos se apropia de tan sólo el 18% (Cuadros No.11, No. 12 y No. 13 en anexos). Se ha podido observar, que el año 2020 el 5% de la población con mayores ingresos se apropia del 18% de la riqueza, lo cual ratifica que entre 2017 y 2020, no hubo avances en materia de distribución de los ingresos.
Conclusiones
Los resultados del presente ensayo permiten afirmar, en nuestro país, la política de redistribución de ingresos que busca estimular la expansión de la economía, a través del fortalecimiento de la demanda interna, ha sido altamente benéfica en el período 2017 con referencia a 2005. No así, en el año 2020 con respecto a 2017, período caracterizado por un estancamiento en materia de distribución de ingresos en Bolivia, aspecto que también se observa desagregando los datos de La Paz y Santa Cruz.
En este punto, cabe destacar que Cochabamba, presentó avances, aunque moderados, en materia de distribución de ingresos.
Las curvas de Lorenz, que se desplazaron más hacia la línea de perfecta equidad, reflejan una mejor distribución de la riqueza entre 2005 y 2017, siendo un aspecto que contribuye a la estabilidad social, dado que la gente lo percibe como más justa. En tanto que en el período 2017 a 2020 no se reflejan avances en términos de distribución de riqueza, entre muchos otros factores, por los efectos de la pandemia por COVID 19.
En Bolivia, para seguir reduciendo más la pobreza se necesita continuar con políticas de redistribución de ingresos; puesto que se ha probado que en el caso de nuestro país existe una relación inversa entre Pobreza y Distribución, para el período analizado.
También se ha probado que existe una relación inversa entre Pobreza y Crecimiento Económico. En el caso de Bolivia para el período 2005 - 2017 se observó una reducción de pobreza considerable y también un crecimiento económico elevado, objetivos que fueron compatibles, y en sintonía con indicadores de mejor distribución de la riqueza (Gini ,Curvas de Lorenz y Cuantiles).
Podemos concluir, por tanto, que la promoción de un rápido crecimiento económico, la reducción de la pobreza, y mejores indicadores de distribución de los ingresos, no son objetivos contradictorios.