Introducción
En Venezuela, el arroz (Oryza sativa L.) junto con el maíz (Zea mays L.) son los principales cereales cultivados. La producción se localiza en dos regiones: Llanos centrales (estado Guárico), Llanos occidentales estados Cojedes, Portuguesa y Barinas. La siembra se realiza en dos ciclos por año, período norte-verano (noviembre a abril) y período de lluvia (mayo a octubre), predominando los sistemas de producción bajo riego por inundación1-3.
Se han considerado como plagas principales en el cultivo de arroz, al barredor Spodoptera frugiperda, la sogata Tagosodes orizicolus, chinches vaneadoras, Oebalus insularis y O. ypsilon-griseus, gorgojo acuático del arroz, Lissorhoptus venezolanus Kuschel. Mientras que Rupella albinella Cramer., (Lepidóptera: Pyralidae) es considerada como plaga secundaria1,2,4-16. En Colombia, R. albinella, un insecto esporádico que reduce levemente el rendimiento del cultivo y sus daños se registran por focos, cuando se presentan altas poblaciones17. El número de adultos se incrementa a partir de 30 días de emergencia del cultivo. El barrenador es favorecido por la humedad ambiental. Este insecto no se considera de importancia económica en arroz. La presencia de sus larvas se asocia con la aparición de hongos como Sarocladium spp., sin embargo, la frecuencia e intensidad de ataque fue aumentando en los últimos años, por la poca rotación con cultivos de hoja ancha como soya, uso inadecuado de prácticas culturales, susceptibilidad de la variedad de arroz: Fedearroz 2000 y al uso indiscriminado de insecticidas de amplio espectro, que han eliminado los enemigos naturales, que regulan sus poblaciones en condiciones de campo. Por otro lado, en Venezuela, específicamente el estado Portuguesa, el uso indiscriminado de insecticidas químicos, e incrementos del área del cultivo, han traído el avance hacia posiciones principales de un insecto, que rara vez causaba problemas: la novia del arroz (NA) (R. albinella)16. Mientras que, Campos18 señala, que el daño lo causan las larvas, perforan el tallo causando una pudrición central del tallo y muerte de la planta. Por su parte, Quevedo17 menciona que, por ser una plaga de poca importancia económica, no dio lugar a un sistema de muestreo en el cultivo de arroz, por otro lado, Novoa Cruz & Álava Vera19 mencionan que se la considera de mayor importancia en el cultivo de arroz, especialmente en localidades de poca altura a nivel del mar, siendo las afectaciones con mayor intensidad.
Fue observada en Centro y Sur América20,21, la especie más común de la subfamilia Schoenobiinae registrándose de México a Brasil. Reportada en el Caribe, América Central, América del Sur, incluyendo Perú y Colombia15. Mientras que el barrenador conocido como “novia del arroz” se encuentra desde México a Perú, y a través del área norte de Sud América, esto es, desde Colombia a Surinam21. Por su parte Reyes22, señala que este insecto, es una especie indígena de la costa del Perú, criada por miles de generaciones en el maíz, pasando luego al arroz, y otras gramíneas, R. albinella, una plaga reportada en regiones tropicales y subtropicales, de México, Honduras y Nicaragua23.
R. albinella no causó daños de importancia económica sobre las variedades de arroz CICA 8 e IR-22, además, que por el excelente control natural de este insecto, no se recomienda su control químico en Colombia, similares resultados, los consiguieron15,24. Así mismo Pantoja & Matta25, mencionan que la población de insectos fluctúa con la edad del cultivo, como ocurre con Hydrellia griseola (Fallén), que tiene el máximo número de adultos hasta los 30 días de edad, Sogatodes orizicolus (Muir) (=T. orizicolus), y Draeculacephala clypeata (Osborn) que presentaron la máxima población hasta los 60 días, mientras que R. albinella, el mayor número de adultos a los 90 días.
Muchas de las especies de insectos, son en su mayoría nocturnas, se sabe que presentan fototropismo positivo, de ahí, son atraídos hacia la luz artificial en grandes cantidades. En la generalidad de los cultivos, se puede utilizar este mecanismo para capturar insectos voladores nocturnos empleando un dispositivo denominado trampa de luz (TDL). La TDL es una herramienta importante para minimizar las plagas de insectos dañinos, sin presentar algún tipo de peligro para los usuarios26,27. Aparte de esto, las TDL se han utilizado para complementar el conocimiento de la fauna insectil de una determinada localidad geográfica, su distribución y actividad estacional, entre otras28-30. El empleo de la TDL en la mayoría de los cultivos: cereales, leguminosas y hortalizas, puede representar un método de captura masiva de insectos. La TDL, también puede ser de gran utilidad para conocer el efecto de los factores meteorológicos y su relación con la abundancia de especies31. El uso de TDL como estrategia de control, fue recomendado por Baehaki32, quien afirmó que las TDL instaladas a 150-250 cm del suelo, usando 100 W de potencia, lograron atrapar 400000 insectos, la mayoría correspondían al saltamontes marrón, (Nilaparvata lugens), una de las plagas más importantes en Indonesia, causando graves problemas en las actividades del cultivo de arroz.
Hoy en día, las lámparas de luz negra son ampliamente utilizadas para atrapar insectos en muchos cultivos a nivel mundial, la identificación y el conteo de las plagas del arroz capturadas con el empleo de TDL son importantes para monitorear su dinámica poblacional y poder llevar a cabo su pronóstico33. De esta manera, se puede determinar el período activo para controlar los insectos plaga bajo condiciones de campo, y poder evitar la pérdida de la cosecha del arroz causada por ellos34. Los factores meteorológicos juegan un papel importante en la abundancia estacional, distribución y acumulación de población de plagas de insectos. Es difícil establece una relación directa de causa y efecto entre cualquier factor individual y la actividad de la plaga, porque el impacto del factor meteorológico sobre las plagas suele ser mayor35-37. Así, los factores abióticos afectan directa e indirectamente a las poblaciones de insectos capturados con las TDL. La aparición de plagas depende de la disponibilidad de alimentos selectos, sin embargo, el número máximo depende de la disponibilidad de alimentos y los factores climáticos38.
Bhatnagar & Saxena39, indican que la temperatura mínima juega un papel importante en la acumulación de las poblaciones de la chicharrita verde (Nephotettix virescens Dist (Cicadellidae, Hemíptera) y la chinche gundhi del arroz, (Leptocoriza acuta Thunberg (Alydidae, Hemíptera), además de la humedad relativa vespertina y la precipitación. Verma et al.28 reportan que el efecto de los factores meteorológicos como: la temperatura, la humedad relativa y la precipitación no fueron significativas en el caso de Heliothis armigera Hubn. Mientras que Persson40, reportó que los parámetros meteorológicos tienen un efecto permanente, y a largo plazo sobre las poblaciones de insectos. Pathak41 menciona que, en Filipinas, las poblaciones de la chinche gundhi del arroz (L. acuta), alcanzaron su punto máximo durante los meses de septiembre y octubre, cuando las temperaturas comenzaron a disminuir. Por otro lado, Sharma et al.34, en India, manifiestan que la precipitación y la temperatura máxima jugaron un papel importante en el aumento de la población del mismo insecto. Mientras que, para la chicharrita verde, N. virescens y el saltahojas, Cofana spectra Dist (Delphacidae, Hemiptera), las variables climáticas no tuvieron ningún efecto sobre sus poblaciones. Moreno et al.42, estudiaron dos arrozales en Acarigua y Turén, estado Portuguesa, Venezuela, abarcando dos ciclos de vida de las plantas (lluvia y sequía), para la recolecta de insectos usaron una trampa de intersección con luz blanca, registrando a las especies plaga del arroz: Hortensia similis, T. orizicolus, Trigonotylus sp., Oebalus sp., Lissorhoptrus sp., R. albinella y S. frugiperda, encontraron que la abundancia, riqueza y diversidad de especies fueron mayores durante la estación lluviosa, indicando que la diversidad de insectos responde a las precipitaciones y a la abundancia de recursos alimenticios de la zona. Del mismo modo, Novoa Cruz & Álava Vera19, manifiestan que la mayor población de R. albinella obtenida, se deba posiblemente al hecho de que la TDL estuvo ubicada dentro del cultivo de arroz, lo cual concuerda con lo indicado por el CIAT43, citando que los adultos de este insecto siempre se encuentran volando sobre las plantas de arroz. Igualmente, Rai & Khan38, ratifican que las mayores poblaciones del saltahojas verde, (N. virescens) resultan de la disponibilidad de alimentos y su dependencia con los factores climáticos. Así mismo, Akhter et al.44, manifiestan que la dominancia de los insectos atrapados con la TDL fue comparativamente mayor desde mediados de marzo hasta mayo y desde agosto hasta octubre en los casos: del barrenador blanco Scirpophaga innotata y el barrenador amarillo del tallo, Scirpophaga (Tryporyza) incertulas (Lepidoptera: Pyralidae). Mientras que para el caso del barrenador rosado del tallo Sesamia inferens (Walter) de septiembre a principios de abril del año siguiente. Al comparar los parámetros climáticos y el empleo de la TDL en la captura de insectos, resultaron importantes, la temperatura y la humedad relativa, registrando las mayores poblaciones dentro de un rango específico de temperatura, que varío de 18 a 35 °C en el caso de los barrenadores blancos y amarillos, mostrando una relación significativa con el total de insectos atrapados. Las mayores capturas en las TDL, se observaron durante el mes de abril, las temperaturas promedio oscilaron entre 30-33 °C, consideradas como las óptimas para la captura de insectos con TDL, mientras que, para el barrenador rosado del tallo, se observó por debajo de los 32 °C durante la temporada de invierno.
Vera Veas & Álava Vera45 en Ecuador, mencionan que utilizando una TDL, obtuvo las mayores capturas de hembras frente a los machos de R. albinella, concordando con lo mencionado por Reyes22 en Colombia. Igualmente, De Galvis et al.46, aseveran que la mayor población de adultos se presentó durante el mes de julio, mientras que en Perú los niveles más elevados ocurren en el mes de marzo, cuando el cultivo está en plena floración o el llenado de granos45.
Se han realizado pocos trabajos, y no se pudo establecer un nivel de daño económico para los taladradores del tallo en arroz. Cardona & Tróchez47, reportaron porcentajes de infestaciones de Diatraea spp., en el Valle del Cauca bajos (0.2 a 3.0 %) que no causaban pérdidas en la producción y, aunque los de la NA, presentaron valores más altos (2.0 a 42 %) tampoco disminuían los rendimientos. Por su parte Cardona & Tróchez47 en estudios posteriores, determinaron que aún en altas poblaciones de larvas por m2, la NA no causó daños de importancia económica, no habiendo, correlación entre el rendimiento de las variedades Cica 8 e IR22 y el número de larvas (R = 0.22), ni con el porcentaje de tallos dañados (R=-0.22). Mientras, la presencia de larvas de la NA a partir de la etapa de floración, registró valores de 13.9 % en la variedad Fedearroz 2000 y 3.9 % para el cultivar Fedearroz 47348, según los autores, reflejan la preferencia del barrenador R. albinella por el genotipo Fedearroz 2000. La NA causa una merma en costos de producción que oscila entre 12 y 20 % en Perú49. Por su parte Pérez Cordero16, en evaluaciones de campo en Payara (Venezuela) 50 % de tallos taladrados por este insecto, disminuyeron los rendimientos en 15 % aproximadamente, recomendando controlar malezas, eliminar socas y usar TDL, mientras, Novoa Cruz & Álava Vera19 mencionan que infestaciones fuertes el insecto puede afectar hasta 50 % del cultivo. El muestreo puede basarse en el conteo de huevos en campo, además se puede basar en el conteo de tallos taladrados en diferentes macollas al azar, se puede calcular un porcentaje de daño, y realizar una muestra del peso de espigas al azar para determinar el efecto en el rendimiento de la plaga20. Entre las medidas de control contra esta plaga, eliminar la soca y usar trampas luminosas dentro del cultivo4.
La información que se presenta, forma parte de un proyecto con el fin de determinar la fluctuación poblacional de las plagas del arroz en Calabozo, estado Guárico, haciendo hincapié en este caso, al taladrador R. albinella, como un insecto-plaga potencial en las siembras del Sistema de Riego Río Guárico (S.R.R.G) y así como, determinar su relación con las variables climáticas: precipitación, evaporación, temperaturas máximas, media y mínima1,2,12,13,50,51.
Materiales y métodos
El dispositivo empleado como TDL es una modificación al tipo Pensilvania desarrollado por Frost52, realizada por Doreste53, descrita en Vivas1, Vivas et al.14.
Cada día a las 4:00 p.m. se colocó un frasco cianurado y se encendió la luz de la lámpara que se encuentra muy cercana a la planta sede del Centro INIA Guárico. Cabe mencionar que, para este estudio, se contó con una trampa luminosa, en los campos de dicho Centro se siembran cada año entre 60 a 80 ha de arroz próximas a la fuente luminosa. A las 7:30 a.m. del día siguiente, se apagó la luz, se tomó el recipiente y se extrajo el material atrapado durante la noche, luego se separaron los insectos sujetos a estudio. Se conservaron las especies de interés agronómico para su identificación y preservación1,11,14.
La información obtenida por la TDL, se llevó a cabo por un período de 17 años (2001 a 2017), se comparó con la información climática de: precipitación, evaporación, temperaturas máxima, mínima y media, aportada por la sección de Climatología del Centro de Investigaciones Agrícolas del estado Guárico, ubicada en el km 28 de la carretera Nacional, vía Apure a 73 msnm, Longitud 67º 30' y Latitud 8º 52'7,8,14.
Para el análisis estadístico, se utilizó el paquete estadístico Statistix54 y de estos, se empleó la prueba no paramétrica de Kruskal-Wallis en un diseño completamente aleatorizado para las variables en estudio, Población de individuos adultos de R. albinella, empleando como fuentes de dicho modelo: la época, el año, los meses del año y la interacción época por año. Así como, las variables climáticas citadas anteriormente.
Resultados
La Tabla 1, se presenta la variación poblacional de R. albinella, se determinó que la mayor incidencia de la población del insecto ocurrió en los meses de abril y mayo, para luego mantenerse casi constantes o con muy pocas variaciones el resto del año, y las menores poblaciones en los meses de diciembre, enero y febrero que coincide con el periodo seco de la zona, En general, se puede señalar que el insecto se encuentra presente en el arroz durante todo el año. En la Tabla 2, se muestra la población del insecto estableciendo rangos, las mayores poblaciones se observaron en los rangos 2 y 3 (entre 5000 a 20000 y más de 20000 individuos) y las menores poblaciones en el rango 1 con poblaciones menores a los 5000 individuos, presentando este último rango diferencias significativas (p≥ 0.05) con respecto a los rangos 2 y 3.
Mes/Año | E | F | M | A | M | J | J | A | S | O | N | D |
---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|
2001 | 7 | 67 | 3834 | 9707 | 145877 | 7342 | 186 | 294 | 1150 | 1648 | 1047 | 25 |
2002 | 132 | 118 | 115 | 295 | 2466 | 967 | 125 | 318 | 492 | 324 | 199 | 18 |
2003 | 34 | 48 | 884 | 258 | 2450 | 226 | 799 | 1049 | 2137 | 1144 | 18 | 35 |
2004 | 13 | 74 | 1628 | 91984 | 146100 | 11895 | 1294 | 995 | 4784 | 960 | 578 | 27 |
2005 | 3 | 2 | 230 | 29003 | 76944 | 1195 | 195 | 145 | 980 | 854 | 386 | 12 |
2006 | 13 | 4 | 978 | 11564 | 44392 | 595 | 73 | 53 | 966 | 290 | 47 | 5 |
2007 | 1 | 19 | 123 | 9255 | 4529 | 244 | 82 | 61 | 1096 | 1817 | 545 | 10 |
2008 | 6 | 75 | 1320 | 10036 | 30809 | 944 | 92 | 183 | 347 | 1786 | 1518 | 50 |
2009 | 0 | 29 | 2185 | 3102 | 26778 | 3735 | 15 | 41 | 131 | 495 | 265 | 4 |
2010 | 33 | 203 | 307 | 3794 | 2578 | 5196 | 122 | 881 | 3136 | 3418 | 1334 | 3 |
2011 | 5 | 3 | 330 | 19735 | 162800 | 21564 | 231 | 263 | 576 | 1109 | 1297 | 28 |
2012 | 1 | 3 | 193 | 5694 | 19178 | 3500 | 23 | 43 | 760 | 3204 | 2353 | 20 |
2013 | 3 | 22 | 719 | 6402 | 53340 | 2882 | 100 | 116 | 395 | 2578 | 330 | 10 |
2014 | 1 | 23 | 2929 | 51569 | 29329 | 508 | 92 | 442 | 655 | 4538 | 2918 | 0 |
2015 | 4 | 55 | 1999 | 5350 | 14695 | 3103 | 158 | 117 | 210 | 549 | 458 | 318 |
2016 | 129 | 24 | 183 | 203 | 2191 | 331 | 43 | 285 | 1863 | 2802 | 2385 | 128 |
2017 | 5 | 54 | 944 | 10409 | 24460 | 419 | 77 | 57 | 1031 | 1053 | 296 | 7 |
Pro. | 22.82 | 48.41 | 1111.82 | 15785,88 | 46406.82 | 3802.71 | 218.06 | 314.29 | 1218.18 | 1680.53 | 939.65 | 41.18 |
s | 41.80 | 51.21 | 1087.66 | 23403,63 | 54202.61 | 5533.80 | 329.15 | 336.86 | 1197.13 | 1231.59 | 897.59 | 77.34 |
S2 | 1747.28 | 2622.13 | 1183013.03 | 547729986.74 | 2937922894.6 | 30622975.47 | 108341.3 | 113474.97 | 1433116.65 | 1516816.26 | 805667.37 | 5982.15 |
Población de R. albinella | Rango | Rango de medias |
---|---|---|
0 a 5000 | 1 | 83.50 b |
5000 a 20000 | 2 | 173.00 a |
> 20000 | 3 | 186.00 a |
(*) Medias seguidas por una misma letra común, no son significativamente diferentes en el nivel de 5%, Prueba de Kruskal-Wallis, información poblacional del programa estadístico
El análisis de la varianza de los datos para adultos de la población de R. albinella, empleando como fuente de variación del modelo: la época, detectó, diferencias altamente significativas para las medias correspondientes, (p ≤ 0.00001).
Al comparar las épocas entre sí, se observó que las poblaciones de R. albinella fueron más elevadas y estadísticamente diferentes en el periodo lluvioso que en el período seco, (Tabla 3), mientras que al comparar los diferentes años, no se observaron diferencias significativas a una probabilidad de (p ≥ 0.9440).
Al comparar los meses del año entre sí, se consiguió diferencias altamente significativas entre ellos (p≤ 0.00001), observándose que las poblaciones de R. albinella fueron más elevadas y estadísticamente diferentes en los meses de abril y mayo (meses con las mayores poblaciones), cuando se comparó con los meses de diciembre, enero y febrero, donde se presentaron las menores poblaciones (Tabla 4).
Meses del año | Rangos de medias |
---|---|
Mayo | 174.28 a |
Abril | 156.41 ab |
Junio | 135.00 abc |
Octubre | 129.53 abcd |
Septiembre | 117.00 abcd |
Marzo | 109.06 abcd |
Noviembre | 106.5 bcd |
Agosto | 77.719 cde |
Julio | 64.25 de |
Febrero | 35.688 e |
Diciembre | 30.875 e |
Enero | 21.688 e |
Medias seguidas por una misma letra común, no son significativamente diferentes en el nivel de 5%.
Cuando se realizó el análisis de varianza para determinar la relación de las variables climáticas con las poblaciones del insecto, solo se observó diferencias altamente significativas con la temperatura mínima (p≤ 0.00001), y con las otras variables, no se observaron diferencias estadísticas significativas, con las siguientes probabilidades: p≥ 0.0523 (precipitación), p≥ 0.7152 (evaporación), p≥ 0.2249 (T. máxima) y p≥ 0.6615 (T. media).
En la Tabla 5, se presenta la relación entre la población de la NA con la variable temperatura mínima, las mayores poblaciones se observaron entre los rangos 2 (23 a 25 °C) y 3 (más de 26 °C) y las menores poblaciones en el rango 1 (20 a 22 °C) encontrándose diferencias significativas (p≥ 0.05) de dicho rango con respecto a los rangos 2 y 3.
Temperatura mínima °C | Rango Temperatura min | Rango de medias |
---|---|---|
20 a 22 | 1 | 71.484 b |
23 a 25 | 2 | 112.050 a |
> 26 | 3 | 96.111 ab |
En la Figura 1, se presenta las poblaciones del insecto en relación a las variables climáticas: precipitación y evaporación, se aprecia que la mayor cantidad de insectos, se presentó, cuando la precipitación superó a la evaporación, ocurrida en el mes de mayo. El análisis estadístico realizado a las capturas en trampa de luz con relación a los datos climáticos de los años en estudio, resultó en la significancia estadística para la variable temperatura mínima (p≥ 0.0001), lográndose las mayores poblaciones entre las temperaturas 23 y 25 °C (Figura 2), Para las otras variables, no dio los resultados estadísticos de significación esperados. Sin embargo, tomando en cuenta las temperaturas (Figura 3), para la T. máxima, las mayores poblaciones, se observaron entre 28 y 29 °C, y las más bajas poblaciones entre 34 y 38 °C. Con respecto a la T. media, las mayores poblaciones, se obtuvieron entre 24 y 25 °C y las menores poblaciones a temperaturas entre los 26 y 31 °C.
Discusión
La mayor abundancia de la NA, se observó de abril a mayo correspondiendo con el final del periodo seco e inicio del lluvioso, para luego mantenerse casi constantes el resto del periodo. Datos, que coinciden con lo reportado por Novoa Cruz & Álava Vera19 en Ecuador, pero difieren a los obtenidos por Vera Veas & Álava Vera45 en Ecuador, que aseveran que la mayor población de adultos, se ubicó en el mes de julio, similares a los obtenidos por Moreno et al.42 en Venezuela, manifestando que las siguientes especies plaga del arroz: H. similis, T. orizicolus, Trigonotylus sp., Oebalus sp., Lissorhoptrus sp., R. albinella y S. frugiperda presentaron mayores poblaciones durante la estación lluviosa en el estado Portuguesa, mientras que, Castillo55 en Perú, manifiesta que los niveles más elevados ocurrieron durante el mes de marzo. Iguales resultados, los reportan Aragón-García et al.56, pero en (Phyllophaga ravida Blanch) (= Phyllophaga spp., (Coleóptera: Melolonthidae: Melolonthinae), que presentó la mayor actividad de vuelo, abundancia, entre junio y julio, que coincide con los dos primeros meses de la estación de lluvias en las zonas maiceras del estado de Puebla, México, empleando TDL fluorescente negra tipo embudo. De la misma manera, las mayores poblaciones del gusano cogollero, S. frugiperda (L.) fueron localizadas durante los meses de junio y julio empleando TDL en cinco localidades del estado Carabobo, Venezuela57. En Colombia se reporta que la mayor incidencia de R. albinella, se presentó durante los meses de octubre, marzo, mayo y septiembre58, resultados similares los menciona Pérez Cordero16.
La densidad poblacional de R. albinella, se encontró relacionada con la época y los meses del año, ya que la mayor densidad poblacional de adultos, se observó durante la época lluviosa, en oposición con las poblaciones del insecto en el periodo seco, que coincide con los datos obtenidos por Vera Veas & Álava Vera45, al contrario de lo registrado por Castillo55, Vivas14 señalando resultados diferentes para la sogata del arroz en Venezuela, empleando TDL y así mismo, Ott et al.59, reportaron un decrecimiento en la abundancia de H. similis relacionada con las altas precipitaciones.
Al relacionar las poblaciones de la NA con las variables climáticas, sus mayores poblaciones coinciden con la época lluviosa, cuando la temperatura se sitúa entre 23 y 25 °C con precipitaciones por encima de 150 mm y las más bajas poblaciones cuando la temperatura superan 26 °C, coincidiendo con la época seca de la zona, datos que concuerdan con los presentados por Castro Borbor & Álava Vera60 en Ecuador, Moreno et al.42 en el estado Portuguesa, Venezuela y similares a los reportados por Meneses Carbonell et al.61,62 en el gorgojo acuático Lissorhoptrus spp., para otra plaga del arroz en Cuba, y contrastan a los obtenidos por Novoa Cruz19 en Ecuador, mencionando que las poblaciones del insecto, se presentaron altas a temperaturas entre 26 y 28 °C, así mismo, menciona que obtuvo una correlación negativa y no significativa entre la población de adultos de R. albinella contra la temperatura, mientras que difieren para la misma plaga en Venezuela, reportándose que las mayores poblaciones de la NA coinciden con la época lluviosa, cuando la temperatura media se sitúan entre los entre 27 y 28 °C y precipitaciones por encima de los 100 mm15. Del mismo modo, Akhter et al.44, trabajando con taladradores del tallo de Asia, consiguió la mayor cantidad de individuos, cuando la temperatura variaron de 18 a 35 °C, en el caso de los taladradores blancos (S. innotata) y amarillo, (S. incertulas); y específicamente cuando, la temperatura promedio se estuvo entre 30-33 °C, considerándose la temperatura óptima para la captura de insectos con el uso de TDL.
Por otro lado, Sharma et al.34, empleando una TDL, tipo Chinsurah en India, manifiestan que el saltahojas verde (N. virescens), saltahojas (Cofana spectra) y el Saltamontes, C. yasumatsui, los parámetros meteorológicos no tuvieron un efecto significativo con la acumulación de las poblaciones de dichas plagas, mientras que para la chinche gundhi, (L. acuta), la acumulación de la población del insecto, tenía una correlación positiva significativa (0.857) con las precipitaciones durante la cuarta semana del mes de septiembre. Así mismo, Rai & Khan38, en un estudio de 26 años empleando TDL para la captura de ninfas del saltahojas verde, (N. virescens), determinaron el efecto positivo que tenía la humedad relativa media sobre sus poblaciones, los demás factores ambientales, como las horas de sol y las precipitaciones, no tuvieron una influencia en las capturas de individuos. Así mismo, Rajpoot et al.27, en un estudio de tres años con seis plagas de arroz, indicaron una correlación positiva significativa entre las capturas y varios parámetros climáticos (temperatura máxima, humedad relativa y precipitación) con los siguientes insectos plaga: saltahojas verde (N. virescens), enrollador de hojas (Cnaphalocrocis medinalis (Guene), la chinche gundhi del arroz (L. acuta), y el taladrador amarillo del tallo (S. incertulas), mientras que en las capturas para el gusano de estuche (Nymphula depunctalis (Guenee) (Pyralidae Lepidoptera), no se observó correlación significativa con la temperatura máxima. Mientras que Novoa Cruz & Álava Vera19, en Ecuador trabajando con una TDL, mencionan que no observaron incidencia significativa de las variables climáticas evaluadas sobre el aumento o disminución poblacional de las especies de R. albinella y D. saccharalis.
Finalmente, en diecisiete años de estudio, las mayores poblaciones del insecto R. albinella se presentaron durante la época lluviosa entre los meses de abril a mayo cuando la temperatura mínima estaba entre 23 a 25 ºC.
La densidad poblacional de la NA se encontró relacionada con la época del año, siendo significativamente superior en la época lluviosa cuando se comparó con la época seca.
Al comparar los meses del año, se observó que las poblaciones de R. albinella fueron más elevadas y estadísticamente diferentes en los meses de abril y mayo cuando se compararon con el mes de diciembre, enero y febrero.
Se observó diferencias significativas entre las poblaciones de la NA con la temperatura mínima, no así con las otras variables climáticas: precipitación, evaporación y temperaturas: máxima y media.
Se puede mencionar que la gran cantidad de individuos de la NA, responden positivamente a las condiciones lluviosas de la zona y a la abundancia de recursos alimenticios de alta calidad.