INTRODUCCIÓN
En la actualidad, se concibe a la lectura, entre otras cosas, como una habilidad que permite la adquisición o ampliación de conocimientos sobre cualquier tema. Desde hace décadas, la humanidad recurre a la lectura de libros y materiales impresos que les ayude a alcanzar los objetivos que planteen sus investigaciones, y más recientemente, en la Web, se dispone de recursos que facilitan la búsqueda y obtención de información. Es por esto que, aquellas personas con dificultades en las áreas de lectura, e incluso en la escritura, acostumbran rechazar esta vía de acceso a la información, aflorando en ellos emociones negativas como ansiedad, temor al fracaso o baja autoestima (Gala, 2022).
Con respecto a la lectura, y a manera de concepto, Carrillo y Alegría (2009) indican que es una habilidad compleja de los seres humanos utilizada para comunicarse, en la que intervienen varios procesos cerebrales. Estos procesos se dividen en: específicos (capacidad para reconocer palabras) y no específicos (vocabulario o la sintaxis); dichos procesos son independientes entre sí, pero se compensan unos con otros, es decir, leer y comprender cabalmente un escrito involucra diferentes procesos cognitivos que se complementan entre sí.
Asimismo, es oportuno indicar que, sin la escritura, la lectura no sería posible. Mediante la escritura, el autor, puede comunicarse, así como expresar ideas, paradigmas o relacionarse. Además, en todo el proceso de la lectoescritura, la comprensión es sumamente importante, ya que al entender lo leído se extraen las ideas relacionadas entre sí para poder utilizarlas en diferentes situaciones del devenir diario. Con referencia a lo anterior, otra destreza importante en el desarrollo de la lectura y la escritura es la conciencia fonológica.
En este sentido, la conciencia fonológica aparece en la literatura como uno de los mayores predictores del aprendizaje y, consecuentemente, como uno de los mecanismos fundamentales para alcanzar el dominio de la lectura (Muñoz, Monzalve, Almonacid y Merellano, 2020). En otras palabras, es una habilidad metacognitiva que implica un grupo de procesos relacionados con el pensamiento, que interviene en la capacidad humana de reconocer palabras escritas (Márquez y de la Osa, 2003). Aprender a leer y escribir es fundamental como habilidad social para comunicarse, por esto, la conciencia fonológica ayuda al aprendizaje del código alfabético, al favorecer la percepción de los vínculos fonema-grafema, y posibilita el descubrir los sonidos en las palabras (Quilca, 2017).
En efecto, Pardo (2017) añade que la conciencia fonológica resulta una estrategia de enseñanza de la lectoescritura, ayudando a los estudiantes con problemas en su adquisición, por cuanto permite a estos, tomando en cuenta la relación fonema-grafema, leer correctamente en varios contextos, permitiéndoles mejorar como lectores. Asimismo, para Luna et al., (2021), cuando se inicia el proceso de adquisición de la lectura usualmente se utiliza la ruta fonológica o indirecta para procesar la información y efectuar la conexión grafema-fonema, por lo que la lectura, requiere la destreza de obtener información fonológica, semántica y sintáctica sobre las palabras con el fin de comprender la información escrita, lo que hace a la conciencia fonológica la habilidad para repensar sobre los fragmentos fonológicos del lenguaje oral.
Ahora bien, cuando ocurre un deterioro en la conciencia fonológica se perturba el procedimiento de decodificación del material escrito, impidiendo la identificación de las palabras y la comprensión del texto. En ese sentido, los docentes tienen la responsabilidad de mejorar las habilidades de lectura de sus estudiantes, principalmente en los primeros años de escolaridad. Además, el aprendizaje de la lectura, como ya se ha expresado es una actividad mediante la cual se accede a variedad de conocimientos que posibilitan el acceso humano a una cultura letrada, a un modo de interpretar el mundo y la vida exigiendo actividades intelectuales que se van potenciando a medida que se avanza en el proceso lector, en una especie de apropiación de los saberes existentes, producidos por la cultura humana, y que son concordantes con los planteamientos de las teorías socioculturales (Baca et al., 2018).
Aun así, en diversos contextos, las investigaciones analizadas se relacionan con el abordaje de la conciencia fonológica en el desarrollo de la lecto-escritura, aunque sin especificar el método, enfoque y filosofía utilizada para desarrollar un proceso tan natural como extraordinariamente complejo. De ahí que existe, en algunos casos, una confusión sobre cómo integrar esta habilidad a los métodos didácticos o enfoques para desarrollar la lectura, así como existen ideas erróneas en la conceptualización de la conciencia fonológica, pues se asocia el aprendizaje de este componente con el método alfabético o con el método fonético (Ramírez, 2019).
De igual forma, diversas investigaciones como la de Paima (2020) encaminada a analizar el aporte de diversas fuentes al desarrollo de la conciencia fonológica y los aprendizajes en la lectura de niños; de Muñoz et al., (2020) quienes investigaron respecto al nivel de conciencia fonológica en estudiantes con funcionamiento intelectual limítrofe; de Salas (2019), respecto a la conciencia fonológica y el aprendizaje inicial de la lectoescritura en el nivel primario; de Gutiérrez y Mediavilla (2018), quienes analizaron la conciencia fonológica y desarrollo evolutivo de la escritura en las primeras edades; entre otras investigaciones, muestran que, en los últimos tiempos, tanto la conciencia fonológica como el aprendizaje de la lectura son elementos fundamentales en el proceso educativo y de vital importancia para la consecución de los objetivos que la sociedad pretende alcanzar a través de la escuela.
En este sentido, el presente estudio tiene como objetivo comparar las investigaciones acerca de la conciencia fonológica y su influencia en el desarrollo de la lectura. Como justificación, en este estudio se hace un acercamiento a las investigaciones realizadas por diversos autores, permitiendo una idea más clara y precisa sobre las consideraciones que los docentes deben contemplar, tanto al momento de poner en práctica las estrategias de desarrollo de la conciencia fonológica de sus estudiantes, así como en el aprendizaje de la lectura y en cualquiera de los componentes del proceso de enseñanza al que la lectura está siempre ligada.
METODOLOGÍA
La investigación adoptó un enfoque cualitativo, utilizando un diseño de revisión sistemática (Baptista, Hernández y Fernández, 2014), y empleando la guía PRISMA (Preferred Reporting Items for Systematic Reviews and Meta Analyses) propuesta por Page et al. (2021). Se llevó a cabo la identificación, selección y análisis de diversas investigaciones disponibles en la web. Para la búsqueda de información, se accedió a bases de datos electrónicas como SciELO, ProQuest, DOAJ, Dialnet, entre otros buscadores de acceso institucional, que ofrecen materiales multidisciplinarios de alta calidad y confiabilidad.
Para garantizar la selección de información confiable, se establecieron criterios de selección con el propósito de centrar y descartar información no relevante para la investigación. Se emplearon descriptores de búsqueda tanto en español ("conciencia fonológica", "lectura") como en inglés ("phonological awareness", "reading"), combinándolos con el operador booleano "AND". Se excluyeron artículos duplicados, no científicos, o no pertinentes a la temática de interés, así como publicaciones que carecían de conclusiones, artículos de opinión, casos únicos y resúmenes de asambleas o congresos. Por otro lado, se incluyeron artículos examinando el título, resumen, explicación metodológica y resultados de los artículos recuperados en la búsqueda, publicados durante los últimos diez años (2012 a 2022), tanto en inglés como en español, y relacionados con el tema del estudio.
Para aplicar la guía PRISMA, se establecieron descriptores específicos ("phonological awareness" y "reading" en inglés, "conciencia fonológica" y "lectura" en español), resultando en un total de 874 artículos encontrados. Posteriormente, se procedió a la identificación de duplicados y a la exclusión correspondiente, dejando un total de 204 artículos. En la fase de idoneidad o elegibilidad, se evaluaron los resúmenes, métodos y resultados de los artículos para finalmente seleccionar 51 artículos. Finalmente, en la fase de inclusión, se escogieron 20 artículos para llevar a cabo el análisis de los aportes científicos más relevantes en relación con la conciencia fonológica en la lectura.
La revisión documental ofrece los aportes científicos más recientes y destacables acerca de la importancia de la conciencia fonológica en el desarrollo de la capacidad para leer y comprender lo escrito. En la figura 1 se demuestra de manera detallada los trabajos científicos identificados.
DESARROLLO Y DISCUSIÓN
La Tabla 1 presenta una sistematización de 20 artículos seleccionados relacionados con la conciencia fonológica en el aprendizaje de la lectura. Cada entrada incluye el título del artículo, los autores y el año de publicación, la muestra utilizada en el estudio, el diseño metodológico empleado y los principales resultados obtenidos. Los estudios abordan diversos aspectos de la conciencia fonológica, como su relación con el aprendizaje inicial de la lectoescritura, su desarrollo en diferentes etapas educativas y la efectividad de programas de intervención para mejorar esta habilidad en niños en edad preescolar y estudiantes de educación primaria.
En la Tabla 1, al analizar los aportes científicos sobre la conciencia fonológica en la lectura, los estudios coinciden en afirmar que los niños que tienen la oportunidad de ser partícipes de forma activa en el desarrollo y construcción del lenguaje alcanzan niveles óptimos en su lingüística, lo que repercute en la consolidación de la conciencia fonológica. En efecto, Cárdenas et al., (2004), reportan que una cantidad gran cantidad de investigaciones demuestran que el conocimiento y el aprendizaje de la lectoescritura está estrechamente ligado al desarrollo de la conciencia fonológica.
Por otro lado, la conciencia fonémica, es crucial para la decodificación de palabras con correspondencias regulares letra-sonido (Bravo, 2004; Gómez et al., 2007; Vargas y Villamil, 2007; Jiménez et al., 2011; Suárez et al., 2019; Salas, 2019). Cuando se habla de conciencia fonológica o fonémica se refiere al conocimiento que una persona tiene sobre la composición interna de las palabras en términos morfológicos; es decir, al conocimiento acerca de la formación morfológica de las palabras. La morfología es una parte de las ciencias del lenguaje que consiste en la capacidad de reconocer, comprender y usar morfemas para entender o crear palabras (Corredor y Romero, 2009), es la habilidad para manipular de manera consciente los segmentos sonoros del habla. Además, Varela et al., (2014), proponen una secuencia en la que el niño adquiere la habilidad para reflexionar sobre su habla y así poder identificar, manipular y segmentar el lenguaje en unidades: fonemas, sílabas y rimas.
Con referencia a lo anterior, este tipo de conciencia se contempla como una habilidad al permitir al individuo reflexionar sobre la propia lengua; es decir, es la destreza que se posee para manejar los factores más simples del lenguaje verbal que involucra el conocimiento silábico y conocimiento fonémico (Gutiérrez y Mediavilla, 2018). En ese mismo sentido, Espinosa (2016), añade que las destrezas de la conciencia fonológica son esenciales en la obtención lectora, desde esta visión, en la primera etapa se debe enseñar a los niños a desarrollar una conciencia de las palabras para lograr decodificarlas, esta habilidad es importante en la fase inicial de lectura (Arancibia et al., 2012).
Respecto a la noción de fonema, Calderón et al., (2006) consideran que constituyen unidades de sonido mínimas y se corresponde a una determinada lengua. Dichas unidades sonoras consienten el establecimiento de diferencias de significados, pues son poseedoras de una función distintiva con base en la oposición fónica (Galicia, 2017). Refiriéndose a los niveles de conciencia fonológica y sintáctica, Bizama et al., (2017), ha comprobado la relación de estas habilidades con el rendimiento en lectura y escritura de palabras aisladas. Los sujetos con mejor rendimiento en las habilidades metalingüísticas (conciencia fonológica y conciencia sintáctica) mostraron un alto rendimiento en lectura y escritura, mientras aprendían de la lectura alfabética contribuyó al desarrollo de conocimiento fonológico (Olaya y Uran 2022).
De los anteriores planteamientos se evidencia que desde muy temprano el niño es capaz de anticipar el significado de un texto a partir de sus conocimientos previos, a partir de la imagen que acompaña a la escritura, a partir de las características del portador del texto (Scherman et al., 2018). De ese modo, las primeras interpretaciones de textos son enteramente dependientes de dos condiciones: una externa (por ejemplo, el contexto) y otra interna (la idea de que los nombres son lo que está escrito). Esta idea infantil, a la que la autora denomina hipótesis del nombre, seguirá vigente por mucho tiempo, a pesar de que las relaciones entre contexto y el texto irán variando.
Partiendo del enfoque cognitivo, la lectura se entiende como una destreza compleja que involucra diversos procesos y recursos perceptivos, cognitivos y lingüísticos (Porta, 2012). En este sentido, de acuerdo con Núñez y Santamarina (2014), la idea presente de lectura discurre por la inevitable decodificación, la misma que está inevitablemente unida a lo que se conoce como comprensión lectora ya que no es suficiente con la determinación de las grafías o letras, su transformación a sonidos, la identificación de términos y la sintaxis, sino que, además, es necesario reconocer los hechos o ideas para establecer relaciones entre ellos, considerando el saber anterior que el lector ya posee respecto a ellos, al mismo tiempo que procede a memorizarlos, a fin de poder esgrimirlos posteriormente. Dichas actuaciones plantean la exigencia de poner a prueba, tales como el razonamiento, la inferencia y la crítica.
Asimismo, para Millán (2010) el aprendizaje de la lectura inicial tiene sus fundamentos en la interacción que el lector establece con el texto, aportando una diversos procesos y acciones conducentes al establecimiento de un esquema de lectura triangular en la que tanto el lector, como el texto y el autor, generan una relación que siempre tendrá como colofón la generación de significados; en tanto que, para Solé (1987), la lectura es el procedimiento mediante el cual un lector es capaz de interpretar mentalmente el lenguaje escrito. En tal discernimiento aparece la influencia del texto -forma y contenido- así como la actuación del lector, tanto en sus aspiraciones como en sus saberes o lecturas previas. Gutiérrez y Mediavilla (2018) consideran que la escritura personifica la estructura fonológica del habla. Incluso, el desarrollo de la conciencia fonología de estudiantes en edad preescolar cuya lengua materna es el inglés, y que están en proceso de aprender español, resultó sorprendentemente efectiva, con la puesta en práctica de una intervención pedagógica de alfabetización emergente (Gonzales y Tejero, 2018).
Es por ello que, el éxito en el aprendizaje lectoescritor involucra las capacidades que el niño posee para identificar los mecanismos sonoros de su idioma, lo que concuerda con diversos estudios desarrollados durante las últimas décadas, los mismos que, en su mayoría, han verificado el rol decisivo de las destrezas de conciencia fonológica en la adquisición y desarrollo de la lectoescritura, del mismo modo que las posibles explicaciones de los problemas que la afectan (Fávila et al., 2016; De la Calle, Villagrán y Guzmán, 2016; Pinzón y Cabral, 2018). Además, para Vega (2017) gran parte del conocimiento se alcanza a través de la comunicación escrita, al lograr que los niños dominen a cabalidad la lectura, esto repercutirá en una óptima prosecución escolar.
Discusión
Como se ha podido observar, las investigaciones en torno a variables tan elementales como la conciencia fonológica o el aprendizaje de la lectoescritura son abundantes y se encuentran distribuidas en todos los criterios que el investigador considera pertinentes para desarrollarlas. Sin embargo, no existen planteamientos uniformes respecto a la enseñanza alfabética de la lectoescritura a estudiantes de educación inicial, aunque este parece ser un propósito bastante posible de alcanzar, aún a pesar de la enorme dedicación que los maestros deben mostrar para generar las condiciones necesarias para que el mismo se produzca de manera óptima.
Además, independientemente de la capacidad docente, es interesante ver que tanto la conciencia fonológica como la lectoescritura constituyen elementos esenciales en las investigaciones recientes. Las investigaciones analizadas permiten establecer la existencia de inquietudes y necesidades que docentes, investigadores o no, pretenden satisfacer mediante el enriquecimiento su praxis investigativa, la misma que no es de dominio exclusivo de un grupo determinado, sino que es factible de ser actuada por todos quienes ejercen su labor educativa a conciencia y teniendo como horizonte el conocimiento que le permita cimentar su actuación educativa.
De otro lado, se ha podido observar que el tema es de amplia consideración en investigaciones de diversos países especialmente de América Latina, lo que permite establecer una imperativa necesidad por parte de los investigadores de indagar en estos dos aspectos fundamentales del aprendizaje que, como ha dicho líneas arriba, constituyen la base sobre la que se sustentan enseñanzas de otras áreas y de otros niveles, a lo que se puede agregar su actuación transversal a todo el proceso educativo puesto que, la relación entre las destrezas que posibilitan el conocimiento de los componentes, de los segmentos, que se estructuran en la lengua oral y las diversas fases del proceso de adquisición de la escritura van de menos a más, complicándose a medida que el proceso educativo avanza y también en función a la predisposición que el estudiante presenta, pues la relación entre el aprendizaje de la escritura y los diferentes grados de conciencia fonológica presentan significativas diferencias en función a las edades de los alumnos.
La investigación, de acuerdo a los planteamientos positivistas, asume la búsqueda de la verdad en torno a los componentes del mundo y sus procesos. De ese modo, el investigador ejerce acciones encaminadas a la búsqueda de elementos que le permitan alcanzar suficientes razones para determinar la validez del conocimiento del que se vale para llevar a cabo su actuación personal, profesional y social. El docente, en tanto, ejercite sus dotes de investigador, es capaz de acceder a la verdad y por tanto a obrar con elementos de suma utilidad para el proceso de aprendizaje, al mismo tiempo que se nutre de factores probados y comprobados científicamente y, por tanto, valiosos para la acción humana que despliega.
CONCLUSIÓN
Luego de lo abordado, es sencillo concluir que la conciencia fonológica guarda una estrecha relación con el aprendizaje inicial de la lectura, ayudando a detectar los problemas lectores que pueden presentarse en los estudiantes. En tal sentido, es imperativo la continua formación y actualización de los docentes, que ayuden a ampliar el abanico de estrategias pedagógicas disponibles y permitan el abordaje correcto cuando exista un defecto que altere el proceso de decodificación del material escrito.
Queda claro que la conciencia fonológica ofrece diversos beneficios, como la obtención y mejoramiento del vocabulario, permite una permanente alfabetización, incluso facilita el aprendizaje de otros idiomas a través de transferencias lingüísticas. Además, simplifica el reconocimiento y uso de los sonidos del lenguaje, convirtiéndola en una destreza metalingüística, que ofrece elementos fonológicos en la lectoescritura. Asimismo, se puede percibir como una solución a los problemas de lectura, brindando de forma continua y sistemática ayuda, incluso formando parte de acciones educativas significativas, incentivando la estabilidad cognitiva obligatoria de los niños en edad al iniciar su proceso formativo por primera vez en la escuela.
Finalmente, es una necesidad imperativa el desarrollo de diversidad de investigaciones en torno a la conciencia fonológica y a los procesos de lectoescritura, pues ésta todavía falta mucho que aprender, y la mayoría de las ya existentes confirman la importancia de esta destreza. Y aunque las mismas provengan de esferas internacionales, con poblaciones y contextos completamente desiguales al latinoamericano, sirven como punto de partida para considerar su relevancia en los procesos del conocimiento y el aprendizaje.
CONFLICTO DE INTERESES. La autora declara que no existe conflicto de intereses para la publicación del presente artículo científico